Rodajas de manzana al horno: snack dulce y saludable

Hay sabores que nos transportan a la infancia, y uno de ellos sin duda es el de la manzana con canela. Las rodajas de manzana horneadas con azúcar y canela son ese tipo de receta sencilla, reconfortante y tan deliciosa que parece un abrazo en cada mordisco. Su aroma al hornearse llena la cocina de un perfume cálido, entre dulce y especiado, que invita a reunirse alrededor de la mesa y disfrutar sin prisa.

Estas rodajas son perfectas para comer solas como un snack ligero, para acompañar un café en la tarde, o incluso como guarnición dulce en una comida especial. Lo mejor es que con muy pocos ingredientes puedes obtener un resultado sorprendente, crocante en los bordes y con un corazón suave y acaramelado.

La inspiración detrás de esta receta

Las manzanas han sido protagonistas de la repostería casera desde hace siglos, y no es casualidad. Son frutas accesibles, nutritivas y muy versátiles, que al hornearse liberan toda su dulzura natural. En esta preparación, el toque de azúcar resalta ese dulzor, mientras que la canela aporta la nota especiada que hace que cada bocado se sienta hogareño y especial.

En mi caso, esta receta nació de esos días de primavera y verano en los que buscaba un refrigerio fácil para compartir con amigos y familia en la piscina o durante un día de campo. Las manzanas horneadas fueron la solución perfecta: ligeras, prácticas y siempre bien recibidas tanto por niños como por adultos.

Ingredientes necesarios

Para preparar estas deliciosas rodajas de manzana horneadas con azúcar y canela solo necesitarás tres ingredientes básicos y mucha ilusión:

• 3 manzanas (pueden ser Honeycrisp, Fuji, Gala o Granny Smith, según tu preferencia).
• 1 cucharadita de canela en polvo.
• 1 cucharada de azúcar blanca granulada.
• Opcional: ¼ de taza de jugo de limón diluido en 1 litro de agua para sumergir las rodajas y evitar la oxidación.

Cómo preparar las rodajas paso a paso

1. Precalienta tu horno a 200 °C y forra dos bandejas con papel pergamino. Esto evitará que las rodajas se peguen y facilitará la limpieza.
2. Lava bien las manzanas. Si prefieres, puedes pelarlas, aunque también quedan deliciosas con la piel. Retira el corazón y corta rodajas finas de aproximadamente 6 mm de grosor. Para que queden todas parejas, lo ideal es usar una mandolina.
3. Prevenir la oxidación (opcional): Si quieres mantener el color claro de las manzanas, sumérgelas unos minutos en la mezcla de agua y limón, luego sécalas con papel de cocina.
4. Coloca las rodajas en las bandejas preparadas, procurando que no se superpongan, ya que eso evitaría que queden crujientes.
5. En un pequeño recipiente mezcla el azúcar con la canela. Espolvorea de manera uniforme sobre las rodajas de manzana.
6. Lleva las bandejas al horno por 1 hora. Pasado ese tiempo, gira suavemente las bandejas para mover un poco las rodajas y favorecer una cocción uniforme. Vuelve a hornearlas por 1 hora más (o hasta 1 hora y media), hasta que estén crujientes y doradas, sin humedad.
7. Deja que se enfríen unos minutos antes de servir. Notarás cómo al enfriarse adquieren aún más textura crocante.

Consejos útiles para un mejor resultado

• Usa manzanas de buena calidad. Las Fuji y Honeycrisp suelen dar un toque más dulce, mientras que las Granny Smith aportan un contraste ácido que también es delicioso.
• Si prefieres un resultado más saludable, puedes sustituir el azúcar por un poco de miel o endulzante en polvo.
• Para un extra de sabor, prueba añadir una pizca de nuez moscada o clavo en polvo a la mezcla de azúcar y canela.
• Conserva las rodajas en un recipiente hermético; se mantienen crujientes por un par de días.

Valor nutricional aproximado

Por cada porción (dependiendo del tamaño de las manzanas):

• Calorías: 55 kcal
• Carbohidratos: 14 g
• Fibra: 2 g
• Azúcares: 11 g
• Potasio: 97 mg
• Vitamina C: 4,2 mg
• Calcio: 9 mg
• Hierro: 0,1 mg

Son bajas en calorías, ricas en fibra y con un aporte interesante de vitamina C, lo que las convierte en un snack perfecto para cuidar la salud sin renunciar al sabor.

Ideas para acompañar

Estas rodajas de manzana horneadas se prestan para muchas combinaciones:

• Con un toque de yogur griego natural y un chorrito de miel.
• Como topping de un helado de vainilla.
• Acompañadas de frutos secos y un poco de chocolate oscuro rallado.
• Junto a una taza de té chai o café recién hecho para la tarde.
• Como parte de una tabla de quesos, aportando un contraste dulce-especiado.

Anímate a prepararlas y compártelas

Si buscas una receta sencilla, deliciosa y que enamore desde el primer bocado, estas rodajas de manzana horneadas con azúcar y canela son la elección perfecta. Son la prueba de que con muy pocos ingredientes se pueden crear momentos dulces que se disfrutan en familia y se recuerdan con cariño.